Historia y sentido de las conferencias cantadas (y bailadas)
La Edad de Plata de la cultura española, en su permanente homenajear y revivir el Siglo de Oro, hace de las conferencias cantadas (y bailadas) una de sus señas de identidad. No es casualidad que los grandes escritores vanguardistas e ilustradores, Federico García Lorca y Ramón Gómez de la Serna, sean también los que hagan de la conferencia una experiencia artística total, una apelación a los cinco sentidos, que es justo aquello de lo que consiste el teatro del Siglo de Oro; incorporaban además algo de la tertulia española, del juego de los artistas en los banquetes y homenajes y del programa de la entonces naciente radio. Hoy en día se la calificaría de performance, pero podemos ver que esto ya era una realidad compleja y plenamente personal en aquella Edad de Plata.
Federico García Lorca
La conferencia cantada llega plenamente con Federico García Lorca, al que sus aficiones al piano y al canto permitían ilustrar personalmente sus charlas. Son dos las principales conferencias cantadas de Federico que nos inspiran: Añada, arrolo, nana vou veri vou y Cómo canta una ciudad de noviembre a noviembre. Federico cantaba desde tonos del Renacimiento como De los álamos vengo madre hasta canciones populares de las que nos deja sus célebres arreglos.
Pero sus espectáculos llegaron a su mejor momento con su colaboración con La Argentinita, que llegó a ilustrar con sus bailes las canciones de las que hablaba Federico, reviviendo, según Federico de Onís, los famosos bailes dramáticos del Siglo de Oro, en una forma totalmente novedosa.
Ramón Gómez de la Serna
El gran renovador de la conferencia fue Ramón Gómez de la Serna, siempre en busca de sus propios géneros, y que la convirtió en una forma artística:
«Contra la mentira de la conferencia yo quería oponer la conferencia que nace el alma como una creación espontánea (…)»
Ramón, como a tantos intelectuales y eruditos españoles, sentía que en los actos académicos había «cosas vagas, soporíferas y un poco sabidas», y por eso renunció a cualquier conferencia que no añadiese «ni nueva cordialidad, ni nuevo conocimiento, ni nueva literatura». El «jazzbandismo» de Ramón ya es una conferencia muy musical. En sus conferencias hay siempre un elemento fundamental de humor. Mientras habla al público, Ramón bebe vermut con sifón, imita el cacareo de los gallos, se come una vela-plátano, hace moverse a un retrato de el Greco, dibuja sobre sábanas de papel, saca su monóculo; llega a hablar desde un columpio e incluso a lomos de un elefante.
Nuestras conferencias cantadas (y bailadas)
La productora For the Fun of It y la Asociación para la Libertad y las Artes Príncipe Baltasar Carlos tienen como empeño trasladar a todos los públicos, en especial a las olvidadas clases medias, el legado del Siglo de Oro y de la Edad de Plata, dejando claro que las letras españolas no se entienden sin la imagen, la música y la danza. Contando con el elenco de actores, músicos y bailarines de For the Fun of It y su experiencia docente como academia, la Asociación para la Libertad y las Artes Príncipe Baltasar Carlos ha puesto en marcha en los últimos años un programa de conferencias y excursiones bailadas, dramatizadas y bailadas, que tienen especial eficacia y aceptación entre los públicos más jóvenes, y que vienen a revitalizar las injustamente denostadas clases maestras y la vivencia de la cultura.